El juez aseguró que la Biblia establece que el matrimonio debe ser entre un hombre y una mujer, por lo que no cumplirá la ley de casar a parejas gay. La comunidad cristiana de Carolina del Norte le dio su apoyo.
Tras el anuncio de la Corte Suprema de Justicia de los Estados Unidos de legalizar el matrimonio gay a nivel nacional, el juez Gilbert Breedlove, de Carolina del Norte, decidió denunciar a su cargo para evitar unir en matrimonio a parejas del mismo sexo.
El hombre, de 57 años, aseguró ser cristiano y su religión le impide cumplir con dicha ley, e insistió que según la Biblia el matrimonio debe ser entre un hombre y una mujer.
“Era mi única opción… toda la Biblia enseña que el matrimonio es entre un hombre y una mujer. Cualquier otro tipo de actividad sexual se define como fornicación, no matrimonio”, dijo Breedlove a la prensa, según el periódico Impacto.