Esta actividad se conoce como “sexting” – una combinación de las palabras “sex” y “texting”.
La pregunta que se hacen muchos padres es que es lo que motiva este tipo de comportamiento. Al entender las motivaciones de los adolescentes, pueden comprender de una mejor manera qué necesidades no satisfechas o que deseos son los que deben tratar para prevenir o detener tal conducta, y para sacar el tema de conversación con sus hijos.
Hace un par de semanas, Danah Boyd hablo en la Universidad de Columbia en la Cumbre sobre maneras de leer y escribir en la web. Su presentación ofrece tres historias para ilustrar lo que ella llama “La lógica cultural detrás de los mensajes con contenido sexual de adolescente.”
Algunos adolescentes envían mensajes de texto sexuales porque están en busca de fama
La primera historia que Boyd relata es de una niña hispana de 15 años de edad, Traviesa, de Los Ángeles, USA. Su perfil de MySpace estaba lleno de “estilo artístico, pero con explícitas fotos desnudas y semidesnudas de sí misma.” ¿Por qué? Debido a que ella se inspiró en “La Reina de MySpace” Tila Tequila, que utilizaba esta red social para impulsar su carrera como personalidad de la TV.
A Traviesa no le preocupaba si sus atrevidas fotos reducirían sus posibilidades de entrar a la universidad. Boyd relata lo sucedido cuando se le preguntó acerca de esto a Traviesa, “ella se rió en mi cara, conmovedoramente me decía que de todos modos no había manera de que ella entrara a la universidad. Desde su perspectiva, la fama era la única manera de salir de su comunidad”.
Algunos adolescentes envían mensajes con contenido sexual porque se están expresando ellos mismos sexualmente.
Boyd también compartió una historia acerca de un grupo de jóvenes que hablaron con ella en Boston sobre la seguridad en internet. Alrededor de la mitad de las mujeres en el grupo admitió haber enviado fotos sexuales, mientras que otras pensaban que la práctica era “zorra” o desagradable. Para las que no se oponían a enviar mensajes con contenido sexual, pensaron que sólo era apropiado si estaban en una relación amorosa, mientras que otras pensaban que era una buena manera de ligar y atraer a un chico.
“Ellas creían que estaban mostrando lo que tenían que ofrecer y que enviar mensajes con contenido sexual no era más que otra práctica en una larga serie destinada a indicar que se trataba de chicas atractivas y sensuales”, afirma Boyd. “Fue muy evidente en sus maquillajes, perfumes, y cortes de cabello extravagantes que la moda era otra forma en la que muestran con orgullo su sexualidad. Ellas notaron que en los sitios web podían dar dar un paso más allá al transmitir su mensaje, sin tener que preocuparse del acecho de los adultos. ”
Algunos adolescentes envían mensajes de contenido sexual, con la intención de difundir calumnias virales, o cyberbullying.
Boyd cuenta otra historia sobre una chica llamada Jade, que vivía en una comunidad rica y era la hija de un director de una escuela privada de la élite. “Un día, la mamá de Jade recibió un correo electrónico de un alumno señalándole un sitio web pornográfico con el que accidentalmente se encontró”. En ese sitio había un vídeo de Jade masturbándose. Al parecer, Jade había estado chateando por vídeo con un chico; ella sabía que él la estaba mirando cuando se masturbaba, pero ella no sabía que él estaba grabándola, y mucho menos que iba a subir el vídeo a un sitio web pornográfico.
Boyd dice que en casi todas las escuelas que visita oye el mismo tipo de historias de mensajes de contenido sexual que resultan muy mal. Las historias “se convierten rápidamente en alguna de las siguientes fórmulas”, dijo.
“Fórmula 1: Chicos y chicas están saliendo para conocerse, se comparten las imágenes. Chico y chica terminan. El amante rechazado avergüenza al otro por la propagación de las imágenes compartidas. Fórmula 2: A la chica realmente le gusta el muchacho, le envía imágenes sexy. Él no siente lo mismo por ella, y responde compartiéndolas y avergonzándola a ella. ”
Por otra parte, Boyd dice cuando una foto se hace viral por lo general implica que los muchachos comparten fotos de chicas con otros chicos, las chicas comparten fotos de chicos y chicas con otras chicas, pero los chicos nunca comparten fotos de chicos con otros chicos (por miedo a ser etiquetados como homosexuales). Esto significa que por lo general las fotos de las chicas se difunden más y más rápido.
En la siguiente parte de esta nota publicaremos cómo enfrentar el problema de raíz.
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