Dios siempre advierte antes de castigar por la desobediencia

Antes que una tragedia vaya a ocurrir, Dios advierte muchas veces a los pueblos, con el propósito de alertarles para que el día de la tribulación no les sorprenda, o para que Dios les libre del juicio si hay humillación en el pueblo. Cuando ocurrió el devastador terremoto en Haití, algunas personas culparon a Dios por la tragedia, pero vemos que Dios siempre advierte a tiempo, para que nadie tenga excusa.

Veremos que en el siguiente video, Dios envió un mensaje Divino, por medio del profeta David Owuor, para que Haití se preparara, y se humillara clamando misericordia a Dios, sin embargo no se tomo en cuenta la palabra de Dios.

Bíblicamente encontramos que en el pasado, Dios le advirtió a Nínive por medio del profeta Jonás un mensaje Divino. En el mensaje Dios le advierte a Nínive que seria destruida en cuarenta días. Jonás predicaba por las calles anunciando el juicio de Dios sobre Nínive, sin embargo esta ciudad tomo muy en serio el mensaje que el profeta proclamaba y se arrepintieron todos (incluyendo los animales), y Dios les concedió vivir más tiempo.

En la actualidad, Nínive se encuentra ubicada (por aquello de la incredulidad) cerca de una ciudad llamada Mosul en Iraq, junto al río Tigris, en donde solo quedan inmensas ruinas. Cuando la ciudad existía en el tiempo bíblico, era habitada por más de ciento veinte mil personas.

Algo si tenemos que agradecerle a Dios, es que a pesar que la tecnología nos llevara al fin, también hay cosas muy buenas que podemos aprovecharlas, para quitarle la venda a los incrédulos.

Visita Nínive pulsando aquí: La ciudad que se humillo ante Jehová Dios de los Ejércitos.



Video Dios le advierte a Haití sobre el terremoto.

 

Venezuela, aquí esta la formula para ser librada del juicio de Dios.

 

Esta formula aplica en todas las naciones.

Nínive se arrepiente

Vino palabra de Jehová por segunda vez a Jonás, diciendo: Levántate y ve a Nínive, aquella gran ciudad, y proclama en ella el mensaje que yo te diré. Y se levantó Jonás, y fue a Nínive conforme a la palabra de Jehová. Y era Nínive ciudad grande en extremo, de tres días de camino. Y comenzó Jonás a entrar por la ciudad, camino de un día, y predicaba diciendo: De aquí a cuarenta días Nínive será destruida. Y los hombres de Nínive creyeron a Dios, y proclamaron ayuno, y se vistieron de cilicio desde el mayor hasta el menor de ellos.


Y llegó la noticia hasta el rey de Nínive, y se levantó de su silla, se despojó de su vestido, y se cubrió de cilicio y se sentó sobre ceniza. E hizo proclamar y anunciar en Nínive, por mandato del rey y de sus grandes, diciendo: Hombres y animales, bueyes y ovejas, no gusten cosa alguna; no se les dé alimento, ni beban agua; sino cúbranse de cilicio hombres y animales, y clamen a Dios fuertemente; y conviértase cada uno de su mal camino, de la rapiña que hay en sus manos. ¿Quién sabe si se volverá y se arrepentirá Dios, y se apartará del ardor de su ira, y no pereceremos? Y vio Dios lo que hicieron, que se convirtieron de su mal camino; y se arrepintió del mal que había dicho que les haría, y no lo hizo. Jonás 3:1-10
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